Elena Plotnikova y Patricio Flexas se especializaron en fotoperiodismo para bodas; a través de sus fotografías brindan a las parejas una opción distinta para recordar el día más feliz de su vida con un trabajo más documental.
Con su proyecto Photo Flexas cambiaron el modelo de negocios en las bodas, y es que a raíz de la pandemia se potenció todo lo que simboliza la internet para los pequeños y grandes negocios.
“Todo el mundo cambia, de acuerdo con la época y las culturas, pero nos dimos cuenta que, en las fotos de bodas, siempre es igual. Las fotos de nuestros padres a la actualidad son muy parecidas. Yo tengo fotos de cuando mis papás se casaron en los setenta en Siberia, y Pato tiene una foto similar de la boda de sus padres en Cuernavaca. La fotografía clásica sigue siendo la misma desde hace más de 50 años”, expresó Elena Plotnikova.
Su proyecto busca salir de la propuesta tradicional de bodas para hacerlo de una manera más honesta, como lo es el documentalismo.
“Al principio cuando comenzamos el tema de las bodas nos dimos cuenta que la industria nos hacía pensar que había una sola manera de hacer las cosas, y que todo tenía que ser de esa manera; nosotros descubrimos mediante el desarrollo de internet y meternos en directorios que era algo muy distinto y amplio”, dijo Patricio Flexas.
Gracias al desarrollo de la internet se dieron cuenta de cómo se hacen las bodas en muchos países, “y en México, y particularmente en Morelos, es muy tradicionalista y si haces bodas distintas a cómo se deben hacer, estás mal”.
“Nosotros pensamos en hacer algo diferente, pero en un principio lo dudamos; sin embargo, después entendimos que quien está cerrado siempre estará así; nosotros buscamos una evolución de lo clásico, y es justamente lo documental”, comentó Patricio.
Con su proyecto se enfocaron en documentar espontáneamente todos esos momentos sutiles, llenos de vida y emoción que suceden en cada boda.
“En la actualidad tomamos fotos para otras generaciones, y lo más importante es seguir tendencias y hacer fotos más naturales; debemos entender que ya cambió el tipo de cliente, porque ahora quienes se casan tienen entre 25 y 30 años, y conocen perfectamente el manejo de las nuevas tecnologías y tendencias; ahora no se busca lo mismo de hace 30, 40 o 50 años”, dijo Elena.
Patricio y Elena realizan su trabajo a partir de la idea de contar una historia, no sólo enfocarse en ciertos momentos como la ceremonia religiosa, sino reflejar todo lo que pasa durante ese día.
Su trabajo consiste en tomar fotos del día de boda, como una historia de ese día; para ellos lo más importante es el día de boda y plasmar todo, desde que los novios se arreglan hasta el último momento de la celebración.
“Nosotros le llamamos una vuelta 360 grados, y lo que queremos es mostrar a través de nuestra mirada cómo pasó todo, y hacer algo más que las fotos cliché”, comparte Elena.
“Es un error pensar que todas las fotos deben ser de los novios, sí es una pareja, pero que convive en un día especial con todos sus invitados. Nosotros no le damos toda la atención a los novios, por supuesto tienen un mayor porcentaje de atención, pero lo más importante es contar la historia, qué sucedió y dónde. Nuestro objetivo es mostrarle a la pareja, aquellos momentos que no vieron durante su boda”.
Patricio y Elena consideran fundamental el trabajo en equipo, pues cada uno aporta sus conocimientos y habilidades para lograr algo increíble y de buena calidad.
“Le damos la vuelta a esa concepción machista; como yo empecé antes haciendo bodas, me dicen ‘Pato, qué buenas fotos haces’ y realmente siempre les digo que somos un equipo. Desde el punto de vista, también buscamos a la pareja en la que los dos estén interesados en las fotos, no sólo la novia”, detalló Patricio.
Cambiar un poco la filosofía sobre las fotos de bodas ha hecho que Elena y Patricio sean los fotógrafos Nikon con mayor reconocimiento en México y premios a nivel mundial.
“Estar dentro de directorios internacionales te da mucha relevancia, la comunidad de fotógrafos, los jurados por así decirlo, te dan puntos de acuerdo con las mejores fotos que subas, cuantos más puntos sumes, más arriba estás en la tabla general y tienes más exposición”, dijo Patricio.
Asimismo, destacaron que uno de los grandes errores en la fotografía de bodas es copiar a los demás o copiarte a ti mismo, en una y otra boda, ya que tu trabajo no tiene originalidad.
Actualmente, debido a su talento y originalidad, Elena y Patricio realizan fotografía de bodas en distintas partes de la República Mexicana, principalmente en Morelos; y gracias a sus premios y reconocimientos internacionales han llegado a un mercado mundial, trabajando en Estados Unidos, Canadá, Rusia y otros países de Europa.
“México tiene un potencial importante, en todos los tops siempre hay mexicanos; para mí es un orgullo representar a nuestro país y particularmente a Morelos”, asegura Patricio.