Con la presencia de dos de las tres “corcholatas” presidenciales y ante más de dos mil 800 de los tres mil congresistas, el dirigente nacional de Morena, Mario Delgado, señaló que éste, el tercer congreso del instituto político, cumple una función refundacional del partido que construyó Andrés Manuel López Obrador.
“Esta reorganización nos llega justo a tiempo, porque estamos en un momento refundacional de Morena. Tenemos que asumir la responsabilidad de esta misión histórica, consolidar la revolución de las conciencias y ganar el futuro con el triunfo de nuestro movimiento en 2024”, señaló.
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En este, que es el primer Congreso Nacional del partido en siete años –y el tercero desde la fundación de Morena– se renovará el Comité Ejecutivo Nacional con excepción de la presidencia ostentada por Mario Delgado, y la secretaría general a cargo de Citlalli Hernández, quienes permanecerán hasta 2024.
También se alistan modificaciones para que desaparezcan los órganos consultivos, el Consejo Nacional y los estatales, así como las comisiones de justicia partidaria y sólo dejar la Comisión Nacional de Elecciones.
En la votación, que será de manera privada durante el transcurso de la tarde, Morena elegirá entre los congresistas locales a los 300 nuevos integrantes del Congreso Nacional, entidad que dentro del partido definirá el método por el cual se seleccionará a los candidatos que competirán en las elecciones de 2024.
El domingo tomarán protesta todos los militantes que hayan sido electos.
En su discurso, Delgado repasó los logros del partido que en menos de una década logró 21 gubernaturas y el Congreso de la Unión junto a sus aliados, sin embargo, llamó a los militantes a no confiarse, pues después de 2024, López Obrador ya no estará al frente del país ni del partido y a partir deberán afianzar a Morena para lograr un partido “que siga siendo el instrumento de lucha del pueblo”.
Una de las grandes preocupaciones para algunas corrientes de Morena, especialmente la integrada por el académico de la UNAM Jonh Ackerman, que acusa a la dirigencia de Mario Delgado de querer desprenderse del carácter de izquierda con el que fue fundado el partido, sigue en el aire.
Al ser cuestionada al respecto, la senadora Citlalli Hernández y secretaria General de Morena con licencia, expresó su inconformidad con dicha propuesta y se mostró a la expectativa de que eso sea rechazado durante la votación de esta tarde.
“Esperemos que eso sea ahorita corregido, es una cosa con la que yo por supuesto no estoy de acuerdo”, aseguró.
Al evento, además de la jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, quien fue ampliamente recibida, también acudieron el secretario de Gobernación, Adán Augusto López Hernández; la secretaria de Educación, Leticia Ramírez, la secretaria de Seguridad, Rosa Icela Rodríguez; y los gobernadores de Sonora, Alfonso Durazo; de Zacatecas, David Monreal; de Michoacán, Alfredo Ramírez Bedolla; y de Chiapas, Rutilio Escandón.