Luego de que los cuerpos de los colaboradores del Instituto Nacional de Salud Pública (INSP): Luis Enrique García Díaz, Luis Javier García Díaz y Noemí Guadalupe Arias Sosa fueran localizados en el municipio de Huitzilac, el vicario general de la diócesis de Cuernavaca, Tomás Toral Nájera dijo que casos como este, son lamentables, por lo que hizo un llamado para el cese de la violencia en el estado.
“Que cese en todos los sentidos, como la violencia familiar y social, como este caso y otros más; como el joven de la contraloría, son lamentables estos hechos que seguimos viviendo y que a pesar de eso seguimos insistiendo en la cultura de la paz y la formación de las nuevas generaciones… como iglesia necesitamos dar esperanza”, mencionó Toral Nájera.
El vicario señaló que continuará con los diálogos por la paz, los cuales comenzaron desde el nivel federal, así como en la comisión de la mesa de la construcción de la paz.
Dijo que estos son temas que están rebasando a la seguridad en el estado, por lo que exhortó a las autoridades reforzar las estrategias para convencer a la sociedad que es necesario construir la paz en el estado.
“Es necesario mirar de que manera esta situación nos sigue rebasando… de no tener esta tranquilidad de los ciudadanos, es importante que a través de estos rubros y diálogos, hacer estrategias para convencer que la cultura de la paz es necesaria”, dijo el vicario.
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